Premio a la Mejor tarea

En este artículo presentamos la mejor tarea realizada sobre el tema de formación acerca del testamento de San Francisco y otros aspectos de su vida.

El premio consiste en la publicación de dicha tarea en este espacio para que asi se insentiven a realizar con amor las actividades de formación que son puestas en la fraternidad en esta oportunidad la tarea que sera publicada es la del Hermano Miguel Alejandro Moreno Iniciado en formación el cual realizó un trabajo magistral sobre la asignación.

Monte Alvernia

En este monte aconteció el hecho más importante de la vida de Francisco.

Francisco fue a orar y entre sus peticiones él le rogaba a Dios sufrir como sufrió su amadísimo hijo Nuestro Señor Jesucristo, así pues, le fue concedido su deseo y se le aparece un crucifijo el cual le hace los estigmas que padeció Jesús en la cruz para el perdón de nuestros pecados.

El regresa del monte con los estigmas en sus manos, pies y costado y así los mantuvo desde ese momento hasta el día de su muerte.

Muerte de san Francisco de Asís

Muere a los 43 años el 3 de Octubre de 1226, este término de muerte es llamado tránsito (Tránsitus) de San Francisco. Para la iglesia el día culmina a las 6 de la tarde y Francisco muere el 3 de Octubre en la noche, es por ello, que se celebra su día el 4.

Sucesor de Francisco para atender la Orden de los Hermanos Menores

El sucesor de San Fco para atender esta orden fue Fray Elías.

Testamento de San Francisco

Más que un testamento son las palabras de Dios a través de nuestro padre Francisco, de gozo e impresión a la vez se llena mi corazón al leer este hermoso texto que es nuestra herencia; nuestro más grande regalo. Es ejemplo a seguir de todos los creyentes independientemente de que sean Franciscanos o no, ya que, es el llamado a la obediencia de seguir e imitar a Jesús.

Cuando Francisco menciona estas palabras “como estaba en pecado, me parecía extremadamente amargo ver a los leprosos”; encierran una gran enseñanza que nos indica plenamente la conversión de Francisco, a él le parecía amargo porque no estaba plenamente con Dios estaba en mundo de fiestas, mujeres, pero no tenía ese toque divino que después se le fue entregado. Al ver a los leprosos era uno más del montón no veía más allá de lo que sus ojos podían ver, sin embargo luego comprendió el llamado de Dios y dice: “aquello que me parecía amargo, se me convirtió en dulzura del alma y del cuerpo”. He ahí la obra de Dios, he ahí la gracia Divina, así Francisco comienza una nueva vida no una vida terrenal sino una vida en Cristo Jesús la mejor vida que podemos tomar a la cual estamos llamados; esto se resume cuando Francisco dijo: “después me detuve un poco y salí del siglo”, desde ese momento el decidió salir del siglo para entrar al siglo eterno; el Reino de los Cielos.

Francisco comprendía firmemente el significado de la palabra Clérigo, el entendió al igual que nosotros debemos hacerlo que los sacerdotes son los enviados terrenales de Dios. Al principio de los tiempos él nos envió a su amadísimo hijo para seguirlo y limpiarnos de todo pecado aunque en su momento después de cumplida su misión aquí en la tierra tuvo que irse de nuevo a su casa al lado de Dios Padre todo Poderoso, pero nos dejó algo muy preciado su cuerpo y su sangre los cuales solo son recibidos y administrados a los otros por medio de los clérigos, grandísima bendición y responsabilidad se les fue entregada y por ellos es que Francisco nos dice que son señores nuestros y los ministros y todos los pertenecientes a la fraternidad debemos respetarlos, amarlos y honrarlos.

De igual forma Francisco fue revelado por el Altísimo mismo a vivir según la forma del santo Evangelio. Con inspiración de Dios creo las reglas de Orden Franciscana que el mismo Papa le concedió, como dicta: “Y yo hice que se escribiera en pocas palabras y sencillamente, el señor Papa me los confirmo”.

Francisco dice en su testamento que todos los que deseamos tomar esta vida debemos dar a los pobres todo los que le podamos dar y solo con lo poco que tengamos bastará, aislándonos de toda codicia terrenal y así vivir con humildad; no solo humildad material sino lo más importante humildad en nuestros corazones. Entregar todo por el prójimo así como Jesús los entrego porque en ellos también esta Dios; ellos son Dios.

En una parte del testamente Francisco dice: “Mando firmemente por obediencia a todos los hermanos que…”, pero más adelante nos narra: “yo quiero obedecer al ministro general de esta fraternidad y al guardián que le plazca darme”.

Él fue el creador de la orden, pero cuando se encontraba moribundo debía ceder su poder a un sucesor siendo el que inicio la orden por obediencia debía respetar al nuevo ministro.

Esta parte combina el respeto y la obediencia a los superiores, el cual le debemos tener ante todas las cosas por la jerarquía en la fraternidad y no hacer más allá de su voluntad cumpliendo firmemente las reglas.

Al final Francisco nos llama a la obligación de obedecer a nuestros guardianes y a rezar el oficio según la regla. Todo Franciscano debe rezarlo cuando lo amerite y a todo Franciscano se le debe de igual forma rezar el oficio como está contenido en la regla.

“Y no digan los hermanos: Esta es otra regla”, cita francisco, porque esto es solo un recordatorio que debemos tener siempre en conjunto con el cumplimento firme de las reglas sin cambiar ninguna palabra y con el mismo entendimiento que se le fue dado a Francisco entenderlas y guardarlas hasta el fin.

Todos estamos llamados a cumplirlas porque el que he de hacerlo en el cielo será colmado con la bendición del Altísimo Padre y en la tierra con la bendición del Hijo y el Espíritu Santo.

   

Felicidades Hermano Sigue Así Paz y Bien 

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